La profesionalización del baloncesto femenino inició en 1997 con la creación de la Asociación Nacional de Baloncesto Femenino (WNBA), siguiendo el modelo de la NBA; rápidamente surgieron estrellas como Lisa Leslie, Tina Thompson, Sue Bird, Diana Taurasi o Candace Parker. El básquet femenino comenzó a obtener más reconocimiento en la segunda mitad del siglo XX, con la creación de la Copa Mundial de Baloncesto Femenino en 1953 y el AfroBasket femenino en 1966. El deporte despegó en Estado Unidos tras la adopción del Título IX que, al prohibir la discriminación por sexo en los programas educativos fundados por el Estado, equipacion españa supuso la aparición de numerosos equipos universitarios; en 1982 se creó un Campeonato NCAA de baloncesto femenino.